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TogglePor Lucía Rivera de la Parra
¿Qué es el liderazgo?
El liderazgo es la influencia que se ejerce sobre las personas, para llevarlas a la acción y generar con ello resultados. Los estilos o tipos de liderazgo son la gama de comportamientos que utiliza una persona para interactuar e influir en los demás. Hablamos de comportamiento, no de personalidad.
¿Cuál es su importancia?
El trabajo de un gerente es dar resultados, el liderazgo efectivo, es entonces una habilidad esencial. Los gerentes que desean ser más efectivos se preocuparán con las respuestas a las siguientes preguntas:
- ¿Es un estilo más efectivo que otro?
- ¿Puede un estilo ser más efectivo en ciertas situaciones?
- ¿Existe un estilo perfecto, o la clave es la flexibilidad de estilo?
El liderazgo efectivo
La investigación sobre efectividad realizada por los siguientes psicólogos: Coch y J.R.P. French Jr. et al; R.C. Anderson; S.S. Sales; E.A. Fleishman y D.R. Peters; así como A.K. Korman, han concluido que ningún estilo de liderazgo es, por sí mismo, más efectivo que otro de manera natural. El Profesor Wiliam James Reddin demostró que la efectividad depende de la adecuación del estilo a la situación en la que se utiliza.
Tipos de liderazgo
En su Teoría 3D de efectividad gerencial el Profesor Reddin, propuso una síntesis lógica de las tipologías de comportamiento del líder, sobre tres dimensiones independientes denominadas orientación a tarea, orientación a relaciones y efectividad.
Liderazgo orientado a la tarea (OT): el grado al cual el líder dirige sus esfuerzos; caracterizada por iniciar, organizar, y dirigir.
Liderazgo orientado a las relaciones (OR): el grado en el cual el líder dirige sus esfuerzos a tener relaciones de trabajo personales, caracterizada por escuchar, confiar y alentar.
Liderazgo efectivo (LE); el grado en el cual el comportamiento del líder se percibe como apropiado para los requerimientos de la situación.
Esta tipología tiene comprobación científica y propone la existencia de ocho estilos de liderazgo:
De las dimensiones de OT y OR se desprenden 4 estilos básicos: Separado, Relacionado, Dedicado e Integrado. De la dimensión de efectividad se desprenden las versiones más efectivas de estos cuatro estilos: Burócrata, Promotor, Autócrata Benévolo y Ejecutivo y las versiones menos efectivas: Desertor, Misionero, Autócrata y De Transacción.
Ocho estilos de liderazgo
Liderazgo ejecutivo: Gerente que usa una marcada orientación a la tarea, así como una marcada orientación hacia las relaciones, en una situación en que tal comportamiento es apropiado y quien es, por lo tanto, más efectivo. Se le percibe como un buen motivador que establece elevadas normas de desempeño, trata a cada persona en forma algo diferente y prefiere la conducción en equipo.
Liderazgo de transacción: Gerente que usa una elevada orientación hacia la tarea y una elevada orientación hacia las relaciones, en una situación que requiere una elevada orientación hacia solamente una o ninguna de las dos y quien es, por tanto, menos efectivo. Se le percibe como indeciso, como alguien que permite que las presiones de las situaciones lo influyan demasiado y como alguien que evita o minimiza las presiones y problemas inmediatos en vez de maximizar la producción a largo plazo.
Liderazgo autócrata benévolo: Gerente que usa una marcada orientación hacia la tarea y una limitada orientación hacia las relaciones en una situación donde tal comportamiento es adecuado y quien es, por tanto, más efectivo; se le percibe como alguien que sabe lo que quiere y cómo lograrlo sin generar resentimientos.
Liderazgo autócrata: Gerente que hace uso de una marcada orientación hacia las tareas y una limitada orientación hacia las relaciones en una situación en que esa conducta es inapropiada y que, por tanto, es menos efectivo. Se le percibe como una persona que no tiene confianza en los demás, que es desagradable e interesado tan solo en la tarea inmediata.
Liderazgo promotor: Gerente que usa una limitada orientación hacia las tareas y una marcada orientación hacia las relaciones, en una situación donde tal comportamiento es apropiado y quien es, por tanto, más efectivo. Se le percibe como alguien que tiene una confianza implícita en la gente y que se preocupa básicamente por el desarrollo de los individuos.
Liderazgo misionero: Gerente que usa una limitada orientación hacia la tarea y una marcada orientación hacia las relaciones, en una situación donde tal comportamiento es inadecuado y quien es, por lo tanto, menos efectivo. Se le percibe como interesado básicamente por lograr la armonía.
Liderazgo burócrata: Gerente que usa una limitada orientación hacia la tarea, así como una limitada orientación hacia las relaciones, en una situación donde tal comportamiento es adecuado y quien es, por tanto, más efectivo. Se le percibe como básicamente interesado en reglas y procedimientos per se, queriendo controlar la situación mediante su uso y siendo consciente de sus obligaciones.
Liderazgo desertor: Gerente que usa una limitada orientación hacia las tareas y una limitada orientación hacia las relaciones, en una situación donde tal comportamiento es inapropiado y, por tanto, es menos efectivo; se le percibe como alguien que no se compromete, pasivo o negativo. En esta tipología se pueden integrar la diversidad de tipos descritos por diferentes autores.